Los radicales libres son un tipo de moléculas dañinas para nuestro organismo debido a su alta inestabilidad. Los suplementos con propiedades antioxidantes pueden ser los más adecuados para combatirlos.
Como todas las moléculas, los radicales libres están compuestos por partículas con cargas positivas (protones), partículas con carga negativa (electrones) y otro tipo de partículas sin carga (neutrones)
Los protones y neutrones se disponen en el centro formando lo que se llama el núcleo y los electrones giran alrededor de este núcleo, algo así como lo hace la Luna sobre la Tierra.
Normalmente, estas partículas están en equilibrio, las cargas negativas y positivas se contrarrestan y la molécula en conjunto es estable.
En los radicales libres la cosa es muy distinta, tienen lo que se llama un electrón desapareado.
Esto implica una alta inestabilidad, lo que hace que reaccionen con las moléculas que tiene a su alrededor para intentar robarles un electrón.
De esta forma, los radicales libres van robando electrones a su paso, inestabilizando moléculas a su alrededor y convirtiéndolas en nuevos radicales libres que a su vez alteran a muchas otras más.
Es por esta razón por la que los radicales libres son tan dañinos para nuestro organismo, alteran las membranas de nuestras células, nuestro ADN...
Los radicales libres son muy comunes en el ambiente y se ven incrementados por la contaminación, el tabaquismo, las dietas desequilibradas, la radiación solar y el estrés entre otros.
Para evitarlos nuestro organismo debe disponer de sistemas antioxidantes que nos protejan frente a estos ataques.